Registro nº | 137 |
N°.Inm. | 15_10 |
Tipo de uso | Residencial |
Comercialización | Alquiler |
Tipo de inmueble | Piso |
Subtipo de inmueble | Piso |
Código postal | 1010 |
Lugar | Wien |
Latitud | 48.21056 |
Longitud | 16.36744 |
País | Austria |
Superficie útil | 150 m² |
N° de estancias | 5 |
Número de dormitorios | 2 |
Número de baños | 2 |
TV por cable/satélite | Sí |
Balcón | Sí |
Alquiler | 385 € |
Alquiler con calefacción incluida | 418 € |
Moneda | € |
Registro nº | 137 | N°.Inm. | 15_10 |
Tipo de uso | Residencial | Comercialización | Alquiler |
Tipo de inmueble | Piso | Subtipo de inmueble | Piso |
Código postal | 1010 | Lugar | Wien |
Latitud | 48.21056 | Longitud | 16.36744 |
País | Austria | Superficie útil | 150 m² |
N° de estancias | 5 | Número de dormitorios | 2 |
Número de baños | 2 | TV por cable/satélite | Sí |
Balcón | Sí | Alquiler | 385 € |
Alquiler con calefacción incluida | 418 € | Moneda | € |
Muy lejos, más allá de las montañas de palabras, alejados de los países de las vocales y las consonantes, viven los textos simulados. Viven aislados en casas de letras, en la costa de la semántica, un gran océano de lenguas. Un riachuelo llamado Pons fluye por su pueblo y los abastece con las normas necesarias. Hablamos de un país paraisomático en el que a uno le caen pedazos de frases asadas en la boca. Ni siquiera los todopoderosos signos de puntuación dominan a los textos simulados; una vida, se puede decir, poco ortográfica. Pero un buen día, una pequeña línea
Año de constr. | 1986 |
Condición | Cómo nuevo |
Muy lejos, más allá de las montañas de palabras, alejados de los países de las vocales y las consonantes, viven los textos simulados. Viven aislados en casas de letras, en la costa de la semántica, un gran océano de lenguas. Un riachuelo llamado Pons fluye por su pueblo y los abastece con las normas necesarias. Hablamos de un país paraisomático en el que a uno le caen pedazos de frases asadas en la boca. Ni siquiera los todopoderosos signos de puntuación dominan a los textos simulados; una vida, se puede decir, poco ortográfica. Pero un buen día, una pequeña línea
Muy lejos, más allá de las montañas de palabras, alejados de los países de las vocales y las consonantes, viven los textos simulados. Viven aislados en casas de letras, en la costa de la semántica, un gran océano de lenguas. Un riachuelo llamado Pons fluye por su pueblo y los abastece con las normas necesarias. Hablamos de un país paraisomático en el que a uno le caen pedazos de frases asadas en la boca. Ni siquiera los todopoderosos signos de puntuación dominan a los textos simulados; una vida, se puede decir, poco ortográfica. Pero un buen día, una pequeña línea
Muy lejos, más allá de las montañas de palabras, alejados de los países de las vocales y las consonantes, viven los textos simulados. Viven aislados en casas de letras, en la costa de la semántica, un gran océano de lenguas. Un riachuelo llamado Pons fluye por su pueblo y los abastece con las normas necesarias. Hablamos de un país paraisomático en el que a uno le caen pedazos de frases asadas en la boca. Ni siquiera los todopoderosos signos de puntuación dominan a los textos simulados; una vida, se puede decir, poco ortográfica. Pero un buen día, una pequeña línea